Según el Instituto Oceanográfico de la Armada, desde el pasado jueves el país está en condiciones de aguaje máximo, evento natural que se mantendrá hasta el 30 de abril de 2017.

Este normal situación del mar coincide con el feriado del 1 de mayo en que existe mayor afluencia de personas a las playas de la costa ecuatoriana.

El el Inocar asegura que los aguajes causan olas de entre 1,5 metros de altura hasta 2,5 y advierte un incremento del nivel del mar más allá de lo usual en las playas del borde costero, así como el riesgo de fuertes corrientes de resaca y un socavamiento del sedimento costero.

Desde los distintos organismo de seguridad se emiten alertas a quienes opten por visitar los balnearios deberán tomar precauciones y estar atentos a las señales de riesgos.

El informe científico indica: «En caso de que se considere necesario restringir el acceso de los turistas a las playas, se pide la comprensión y colaboración por parte de la comunidad y que comprenda que lo que se busca es salvaguardar la seguridad de la vida humana en el mar.»

Pero que además que, en caso de ser arrastrados por la corriente de resaca, es imprescindible mantener la calma y recomendaron no luchar contra la corriente, pero que se debe nadar en dirección paralela a la orilla hasta que deje de sentir la fuerza de arrastre o mantenerse flotando hasta ser rescatado.

También sugirió a quienes realizan labores en embarcaciones pequeñas, utilizar siempre los implementos de seguridad, especialmente chalecos salvavidas y equipos de comunicación en buen estado.

Oromar Televisión, desde Manabí para Ecuador