El presidente Donald Trump ha generado controversia al ordenar al Departamento del Tesoro de EE.UU. suspender la fabricación de monedas de un centavo, citando su costo de producción superior a su valor. En un mensaje en Truth Social, Trump calificó esta práctica como un “derroche” y enfatizó: “Durante demasiado tiempo, hemos acuñado centavos que nos cuestan más de dos centavos”.

Según la Casa de la Moneda, en el año fiscal 2024, la producción de casi 3.200 millones de centavos resultó en una pérdida de 85,3 millones de dólares, con un costo por unidad de 0,037 dólares, frente a los 0,031 dólares del año anterior. Las monedas de cinco centavos también están generando pérdidas, con un costo de producción de 0,14 dólares por unidad.

Aunque la propuesta ha sido bien recibida por algunos, su viabilidad es incierta. La fabricación de las monedas está regulada por el Congreso, por lo que una acción unilateral del presidente podría no ser suficiente para eliminar el centavo. A lo largo de los años, ya han existido propuestas para reducir o eliminar esta moneda debido a su bajo valor y alto costo operativo, siguiendo ejemplos de países como Canadá, que dejó de acuñar el centavo en 2012.

La medida forma parte de la estrategia del gobierno de Trump, impulsada por Elon Musk a través del Departamento de Eficiencia Gubernamental, que busca reducir el gasto federal en 2 billones de dólares, eliminando “el desperdicio”, incluso si es solo un centavo a la vez.

La orden marca un nuevo paso a los esfuerzos por reestructurar la economía del país. Sin embargo, el futuro de la propuesta dependerá de la respuesta del Congreso y de los procedimientos necesarios para su implementación.