El sismo se sintió en la madrugada del lunes, y tuvo una magnitud de 7.8 en la escala de Richter, las autoridades del rescate ratificaron que se ha suscitado al menos 5.000 víctimas mortales en Turquía y Siria.
Tendría una superficie de 10 kilómetros y el epicentro se ubica a 23 kilómetros del distrito de Nurdağı, al suroeste de Turquía, por lo que fue sentido también en Siria y Líbano. Otro terremoto, de 7.5 grados, sacudió al país el mismo día.
“Había gritos por todas partes, retiré piedras con mis manos para sacar heridos”, “Solo aspirábamos a morir juntos”, los dolorosos relatos de varios sobrevivientes al terremoto de Turquía.
“No sabemos qué tan alto será el número de víctimas mientras continúan los esfuerzos para levantar los escombros en varios edificios en la zona del terremoto”, anunció el presidente turco, Tayypi Erdogan.
«Es probable que miles de hogares hayan sido destruidos, de trasladar a las familias y exponiéndolas al clima en una época del año en que las temperaturas disminuye regularmente por debajo del punto de congelación y la nieve y la lluvia helada son usuales. Las fuertes tormentas de nieve también sacudidas recientemente partes de Siria y Turquía, con más temperaturas diminuto cero pronosticadas» y se esta está trabajando con el gobierno de Turquía y la Gestión de Desastres y Emergencias de Turquía en las necesidades emergentes vinculadas a la respuesta humanitaria más amplia, mencionó la UNICEF.
«Los niños en Siria siguen enfrentándose a una de las situaciones humanitarias más complejas del mundo. El empeoramiento de la crisis económica, las continuas enemistadas más ubicadas en una década de una dura disputa, por el alejamiento masivo y la infraestructura», indicó la UNICEF.
