La justicia ecuatoriana impuso una multa económica y una pena de un año de prisión a una mujer que transportaba en su vehículo una serpiente boa constrictor, en la lista roja de reptiles, en el asiento de su vehículo y cuyo origen y destino no pudo justificar, informó la Fiscalía.

El solo hecho de tener a ese reptil «ya constituye un delito” contra el ambiente, precisó el Ministerio Público, que detalló que el vehículo fue detectado cuando circulaba por el sur de Quito, una ciudad de clima frío, cuando esa especie vive en las selvas tropicales.

La infractora, únicamente identificada como Delis Jadira V. A., llevaba el animal en una caja de plástico que estaba dentro de una caja de cartón. La justicia consideró que ha puesto injustificadamente en riesgo un bien protegido y parte de la biodiversidad y recursos naturales.

En la constitución aprobada el 2008, Ecuador se proclamó como primer país del mundo en reconocer derechos a la naturaleza y biodiversidad, además es un estado suscriptor y adherente de convenios internacionales para la protección de la biodiversidad y recursos naturales.

El fallo de la justicia ordenó el pago de una multa de 1.700 dólares a la sentenciada. La boa fue trasladada a una universidad para posteriormente ser reinsertada a su entorno natural.