La pistola de un policía fue disparada de manera accidental mientras tres hermanos, hijos de un policía, jugaban con ella.

El hecho ocurrió en Guaranda, ciudad ubicada en la provincia de Bolívar. Uno de los menores falleció, indicaron las autoridades.

De acuerdo a información emitida por la Policía, el agente arribó al edificio para realizar un cambio de guardia, junto a sus tres hijos de 14, 13 y 10 años. Él dejó su pistola en la habitación.

Ese día se había agendado una quema de monigotes por motivo de las fiestas de Fin de Año, debido a esto los policías salieron al exterior de la unidad. Los tres menores quedaron al interior de la unidad policial, fue cuando se escuchó un disparo.

Tras el suceso, el fiscal de turno de Guaranda, Jorge Rea Quilumba, arribó al sitio junto a más agentes policiales. En la zona se encontraron los siguientes indicios: una bala, una pistola y un chaleco antibalas.

A pesar de que los servicios de emergencia fueron contactados de inmediato, el niño falleció aquella misma noche.