El pleno del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó una resolución en la que condena el ingreso, el pasado 5 de abril, de la fuerza pública ecuatoriana para sacar de la misión diplomática de México al exvicepresidente Jorge Glas, a quien le habían concedido el asilo diplomático días antes.

El documento impulsado por Colombia y Bolivia recibió el apoyo mayoritario dentro del Consejo Permanente.

El único país en votar en contra fue el mismo Ecuador, representado por el vicecanciller encargado, Alejandro Dávalos.

Además, El Salvador se abstuvo y la representación de México estuvo ausente, al igual que Venezuela, que en 2017 había solicitado la salida del bloque regional.

La OEA remarcó que se trató de una grave violación a la inmunidad de una sede diplomática. La delegación de Quito, que expuso sus argumentos un día antes, pidió actualizar las normas de asilo diplomático para “enfrentar fenómenos delictivos” y evitar abusos.

El documento aprobado por la OEA reafirmó «la obligación de todos los Estados de velar por el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas».

Además, la resolución exhortó a Ecuador y México a que «inicien un diálogo y tomen acciones inmediatas para resolver este grave asunto de manera constructiva».