De acuerdo con una encuesta nacional denominada «Tu Voz, Tus Derechos» realizada por la Red Nacional de Niñas, Niños, Adolescentes y Jóvenes Wampra Kunapak Yuyay Kuna, con el apoyo de World Vision Ecuador y del Ministerio de Educación, el 76% de los niños, niñas y adolescentes en Ecuador se consideran felices, mientras que el 12% se siente estresado, el 6% cansado y el 2% triste. Sin embargo, resulta preocupante que el 20% de ellos enfrenta dificultades para reconocer y gestionar los sentimientos negativos, como la tristeza y el estrés.

Estos hallazgos se obtuvieron a través de la participación de 247.102 encuestados de las 24 provincias del país, lo que proporciona una visión importante sobre la salud mental en esta población. En este sentido, las acciones de las instituciones educativas son fundamentales para fomentar una correcta salud mental en sus estudiantes.

En este contexto, la psicóloga Gabriela Zaruma, Coordinadora del Departamento de Consejería Estudiantil (DECE) del Colegio ISM (International Scholastic Model), señala que el abordaje de la salud mental es más crucial que nunca, debido a que el bienestar emocional influye directamente en la calidad de vida de las personas. Por tal motivo, considera que las instituciones deben fomentar un ambiente, donde los estudiantes, docentes y familias prioricen su bienestar emocional, para lograr una adecuada formación académica y personal.

“Como institución educativa, ISM implementa un proyecto de innovación enfocado en la educación emocional, que se implementa desde segundo de básica hasta tercero de bachillerato. Este proyecto es un pilar fundamental, que refleja nuestro compromiso con el bienestar emocional de toda la comunidad educativa. El programa incluye una certificación de educación emocional para los docentes que dictan esta clase, una hora semanal dedicada a actividades emocionales en un aula con espacios coloridos y diferentes. Además, el colegio promueve el uso del “ISM HEART DIARY”, como una herramienta innovadora que apoya el registro y reflexión sobre experiencias emocionales”, comenta Gabriela Zaruma.

Adicionalmente, el colegio ISM impulsa la campaña denominada “We Care”, que tiene como objetivo la prevención y promoción del bienestar emocional y la salud mental, involucrando activamente a toda la comunidad del colegio. Para lograrlo, según la experta, es necesario considerar los siete enfoques que guían el trabajo del DECE: derecho, género, bienestar, interculturalidad, integración, inclusión y pedagogía, los cuales facilitan un abordaje integral con los estudiantes de todas las secciones de la institución educativa.

Actualmente, los niños, niñas y adolescentes se encuentran inmersos en una sociedad que presenta factores, que pueden llevarlos a adoptar comportamientos negativos, los cuales los exponen a conductas de riesgo, como actitudes destructivas, promiscuidad, embarazos tempranos y el consumo o abuso de drogas.

Por esta razón, el DECE promueve la iniciativa “We Care”, como un «nuevo reto», ya que su visión va más allá de la simple prevención de conductas de riesgo, sino que, además, brinda a las niñas, niños y adolescentes oportunidades para asumir desafíos, que les permitan lograr un crecimiento positivo y mayor autonomía.

En el Colegio ISM, esta campaña aporta significativamente al desarrollo emocional y académico de sus alumnos, fomentando habilidades emocionales que mejoran su bienestar general. Al promover la autoconciencia, la empatía y la gestión emocional, los estudiantes no solo mejoran su rendimiento académico, sino que también obtienen competencias clave para la vida.

Para Gabriela Zaruma, la influencia positiva que promueve el colegio ISM se manifiesta en un ambiente escolar más colaborativo y en la reducción del estrés, lo que resulta en un aprendizaje más efectivo. La experta considera que las iniciativas de ISM puede ser una fuente de inspiración para otras instituciones, que buscan fortalecer el desarrollo integral de su comunidad educativa.