Aquiles Álvarez, alcalde de Guayaquil, enfrenta una creciente presión judicial tras haber incumplido la medida cautelar que lo obligaba a utilizar un grillete electrónico.

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La orden fue dispuesta por un juez en el proceso por el caso Triple A, donde se lo investiga por un presunto delito de comercialización ilegal de combustibles.

Justifica su negativa con una condición médica

Álvarez presentó un certificado médico alegando que sufre de hipertensión, taquicardia paroxística y antecedentes de miocardiopatía hipertrófica, lo que, según él, hace incompatible el uso del dispositivo.

Sin embargo, no entregó los exámenes prometidos ni se presentó a colocarse el grillete. En su lugar, pidió un peritaje médico que constate su situación.

Fiscalía, Petroecuador y ARCH piden prisión preventiva

Tres entidades han solicitado al juez que se dicte una medida más severa.

La Fiscalía General del Estado, Petroecuador y la Agencia de Regulación y Control de Hidrocarburos (ARCH) coincidieron en que el alcalde ha desacatado una disposición judicial, por lo que debería aplicarse prisión preventiva para garantizar su comparecencia.

La ARCH incluso advirtió que Álvarez estaría incurriendo en el delito de “incumplimiento de decisiones legítimas de autoridad competente”, contemplado en el artículo 282 del COIP, con penas de hasta tres años.

Audiencia está fijada, pero piden adelanto

El juez ha convocado la audiencia de revisión de medidas cautelares para el 27 de mayo de 2025.
No obstante, tanto la Fiscalía como las entidades involucradas y la defensa del alcalde han solicitado adelantar la fecha, ante la tensión creciente del proceso judicial.