Luego que fueron oficialmente posesionados Guillermo Lasso y Alfredo Borrero, se dio paso al discurso de nuevo Presidente de Ecuador, mismo que empezó haciendo alusión a la luchas libertarias, para luego explicar el significado de su eslogan «El Ecuador del Reencuentro».

Entre sus palabras, también sentención «que hoy debemos examinar si a lo largo de estos 200 años hemos estado a la altura de los ideales republicanos.» y dejó claro que con el inicio de su Gobierno termina la era de los caudillo» en otra parte de sus palabras expuso que «solo hay una respuesta posible ante el autoritarismo: democracia, democracia y más democracia.»

Aseguró que las causas de su Gobierno serán las causas de la gente. Que la voluntad del Gobierno, será la voluntad del pueblo, movido por los mismos objetivos y las mismas esperanzas. Y que su intención es maximizar la capacidad para servir al Ecuador.

As{i mismo fue enfático al decir: «Respetaré la institucionalidad actual hasta que el pueblo decida lo contrario» y al referirse a la Función Legislativa que espera un «debate apasionado pero leal, vibrante pero constructivo, donde prevalezca la búsqueda de la verdad y el bien Lara lis ecuatorianos.»

Dijo también: «Esto no es un listado de promesas, no será un gobierno que solo promete, será un gobierno que también compromete a todos, es obligación de todos asumir los desafíos que nos impone el futuro.» y que el Ecuador del reencuentro también es para llegar al «hambre cero», relievando la importancia del agua para lo cual rememoró a Jaime Roldós.

«Aspiro a que mis acciones hablen tan elocuentemente como las palabras del presidente Roldós. Que mis decisiones reflejen sus pensamientos, que mi conciencia responda a sus ideales, y que así despierte en los jóvenes el mismo fervor cívico que en mí brotó hace 40 años.»

Hizo un llamado a la reactivación de la sociedad civil por una verdadera participación en Ecuador y resaltó: «Seré el Jefe de un Estado laico, pero no implica negar nuestro lado espiritual, que nuestras convicciones sean puentes». Además de dar importancia a la reinserción del país al contexto internacional.

Dijo en otra de su discurso, luego de agradecer a su familia y reconocer las palabras de sus padres: «Quien hubiera dicho que un ex banquero y una lideresa indígena ocuparían altas funciones» no sin antes recordar que la actual presidenta de la Asamblea fue una perseguida del correísmo. Finalizó su discurso resaltado nuevamente y de maneral textual las palabras de Jaime Roldós: «Mi poder en la Constitución y mi corazón en el pueblo ecuatoriano».

Minutos antes hizo alusión a la vacunación y al proceso que se cumplirá, liderado por el Vicepresidente Alfredo Borrero.

Otras frases del discurso:

“Pido a Dios la sabiduría para guiar a mi país en este camino donde muchos antes de mí se extraviaron. Que me conceda la prudencia para discernir siempre entre lo conveniente y lo correcto, entre lo pasajero y lo eterno”

«Quiero ratificar que seré el jefe de un Estado laico, pero eso no implica un país donde se niegue nuestro lado espiritual»

“… donde el pueblo no solo conserve su irrenunciable derecho a la autodeterminación, sino también a ejercer su función protagónica en el ejercicio de una auténtica democracia.”

«Hoy, en esta transmisión de mando, no debe ser solo el Presidente quien asume el desafío, debemos ser todos juntos. Que toda la ciudadanía sienta que el poder regresa al pueblo ecuatoriano.»

“Este Gobierno incentivará a la sociedad en todas sus manifestaciones para que adopte iniciativas de cooperación en el desarrollo de su Estado y de su economía.”