Natalia Améstica, ex manager del rapero venezolano «Canserbero», confesó haber acabado con la vida del intérprete. Esto ocurrió a casi una década de su fallecimiento, luego de hacer creer que el artista había atentado contra su vida.

Natalia indico que Canserbero asistió a su casa para grabar unos videos para Panamá, y ella les dio una bebida para dormirlos. Ella ataca a su Esposo por motivos de Ira, y Canserbero vio el suceso, pero ella lo apuñalo también, ya que estaba medio dormido por la bebida.

“Quien me ve es Tirone (Canserbero), se preocupa mucho, pero también estaba somnoliento. Yo le explico que fue un ataque de ira, que no me pude controlar. Él cae al sofá dormido, a él le doy dos puñaladas en el costado (de su cuerpo)”.

Para ocultar el crimen, Améstica se comunicó con su hermano Guillermo para que la ayudará y él arribó con tres funcionarios del SEBIN (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional es el organismo de inteligencia del gobierno de Venezuela).

“Desconozco sus nombres, ellos terminaron de arreglar la escena para que fuera un homicidio-suicidio. Eso quiere decir que mi hermano le da cuatro puñaladas a Carlos, los funcionarios hacen el resto. Mi hermano se va del departamento porque no puede estar en la escena. Me cambio, pido auxilio a los vecinos y ahí llega el CICPC (Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas) quienes se encuentran con mi hermano y él les ofrece 10 mil dólares para que terminen de arreglar la escena”.

La versión de un homicidio-suicidio se mantuvo por ocho años a pesar de presentar varias inconsistencias, como la posición de su cuerpo y la sospecha de que la única autopsia que se le practicó al rapero pudo haber sido manipulada.