Transgéneros ecuatorianos votaron hoy por primera vez de acuerdo a su elección de género, en lo que los activistas dicen, son signos de progreso en la nación andina socialmente conservadora y mayoritariamente católica.

Después de años de gestión por la comunidad LGBTI y la oposición por parte de católicos, Ecuador aprobó el año pasado una ley permitiendo a las personas elegir un género en su cédula de identidad.

En Ecuador, hombres y mujeres esperan en filas para acceder a las papeletas de votación, que durante años crearon momentos incómodos para transexuales, que tuvieron que ponerse en el lugar de su sexo biológico. «Empezaban sus rumores, las miradas», dijo la activista Marisol Mite, de 32 años, quien cambió el año pasado su descripción de identificación a género mujer.

Los temores por la discriminación eran evidentes. Los votantes preferían enviar a sus familiares a esperar en la fila, hasta estar cerca de recibir las papeletas, según lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros.

Diane Rodríguez, activista y candidata a la asamblea, después de votar en Guayaquil, dijo: «Esto es importante porque se están reivindicando nuestros derechos, no ha sido fácil». Se estima que 200 personas en el país de 16,5 millones de habitantes han cambiado su género en su tarjeta de identificación desde que se aprobó la ley, agregó.