Según informó la Fiscalía se trató de un acto urgente solicitado por la Policía Nacional, sobre la presunta existencia de materiales explosivos en las instalaciones de la Casa de la Cultura.

A eso de las 09:00, agentes de Criminalística y de equipos élite como el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) ingresaron a las instalaciones de esa institución acompañados de un fiscal recabando elementos por un posible delito flagrante que fue denunciado de forma anónima.

La Fiscalía agregó que luego de las diligencias no se incautaron indicios ni se registraron detenidos, de su lado la policía emitió también un comunicado señalando que recibieron una llamada, en la que se denunciaba que 30 personas ingresaron posiblemente con explosivos y armas de fuego pero ¿qué posibilidad hay de acoger a los manifestantes en las instalaciones?.

El presidente de la Casa de la Cultura, Fernando Cerón, en declaraciones a la prensa, denunció la toma y aseveró que «con mucha pena tengo que decir que hoy ha muerto la cultura. Hoy la tiranía, la oscuridad, el terror le ha ganado a la vida, a la alegría, a la diversidad, a la pluralidad, hoy el terror está posándose en la institución cultural más importante del país». Este accionar ha generado rechazo de distintos actores.